¿Qué profesional se encarga de restaurar un mueble antiguo? ¿Que es un taller para restauración de muebles?
No es una casualidad que crezca la demanda de cursos relacionados con la restauración de muebles. Esta tendencia está ligada al deseo de muchas personas de aprender y dominar una nueva habilidad. La restauración de muebles implica varios trabajos de ebanistería. Queremos saber por que la restauración de muebles se ha convertido en una tendencia de futuro. Por ello consultamos a Caballerorestauracion.es, una empresa especializada, de Madrid, que realiza todo tipo de restauración de muebles, desde muebles antiguos o vintage hasta rústicos. Y estas son nuestras conclusiones…
AUMENTA LA CALIDAD Y LA VIDA ÚTIL DE LOS MUEBLES
Cuando pensamos en la restauración de muebles, solemos asociarla directamente con sofás, mesas, camas, armarios y sillas de madera.
Pero hay mucho más, y es en esos muebles tan necesarios en una casa, y que puede tener un alto coste económico y un gran valor sentimental, donde la restauración puede cobrar su máxima importancia.
Podemos así aumentar la duración de uso, evitando gastar dinero en la compra de muebles nuevos.
Restaurar muebles puede traducirse directamente en un ahorro de dinero. Si el mueble tiene un valor sentimental importante, un valor económico e histórico, la restauración siempre será menor, en costes, que la compra de cualquier mueble nuevo. Esto da oportunidades, sobre todo, a las personas que se convierten en profesionales del arte de la restauración.
La restauración de muebles tiene claras justificaciones para su popularidad. Un mueble restaurado, cuya vida se alarga o que se integra como mueble nuevo, útil y totalmente renovado, es un mueble que se ha evitado que acabe en la basura, con la contaminación que genera este proceso. Cuando se restaura un mueble, además, las personas tienen la posibilidad de personalizar su mueble al máximo de sus posibilidades, sin tener que comprar uno nuevo.
También vemos como mucha gente ha entendido que especializarse en el negocio de la restauración de muebles puede ser una decisión gratificante. La venta de muebles restaurados es un mercado que actualmente va bien, por lo que se pueden ofrecer los servicios como restaurador, o comprar muebles usados para mejorarlos, darles un segundo uso y revenderlos con una importante ganancia.
La restauración, como servicio prestado a terceros, es también hoy una profesión muy valorada y con una excelente remuneración. Los muebles usados, en desuso o rotos pueden ser una posibilidad de negocio.
El proceso de restauración de muebles incluye una serie de técnicas, materiales y herramientas enfocadas a recuperar todas aquellas piezas que tienen un gran valor sentimental y se han deteriorado con el paso del tiempo, o muebles de aspecto anticuado que solo requieren un cambio de aspecto.
La profesión de restaurador de muebles es muy popular en la actualidad, debido al creciente interés por las antigüedades. Para realizar este trabajo no sólo es necesario adquirir un perfecto dominio de las técnicas de carpintería, sino también aprender las nociones de pintura y el manejo de otros materiales con los que se fabrican muchos muebles, como el hierro y otros metales o plástica.
Los clientes de un taller de restauración de muebles son esencialmente propietarios de viviendas o inmuebles comerciales. También pueden ser propietarios de edificios antiguos que necesiten restaurar muebles.
La restauración de muebles es para quien gusta del bricolaje, la carpintería, la ebanistería y las artes decorativas, y puede ser una oportunidad laboral muy interesante.
Hace años, muchos muebles viejos terminaban en basureros o rastrillos; sus dueños prefirieron comprar muebles nuevos, más prácticos y modernos, dejando tras de sí verdaderos tesoros. Pero hoy en día la mayoría de la gente es consciente del valor de estas piezas, realizadas con maderas nobles como la caoba, el nogal o el roble y con unos acabados preciosos que nunca pasan de moda…
Precisamente por eso, la restauración de muebles es hoy más popular que nunca.
Los profesionales pueden ganar excelentes salarios mientras realizan un trabajo encantador y creativo.
¿Cuál es el objetivo de un taller?
Lo que se trata es darle nueva vida al mueble. Siempre que veamos un mueble que necesita arreglo hemos de pensar que no se debe tirar, sino que se puede restaurar y se puede hacer algo nuevo con él. Está muy presente la idea de reciclar, de reutilizar todo.
Los muebles históricos nunca pasan de moda. Si no, que se lo pregunten los que enarcaron las cejas asombrados al ver que Manolo March había “ganado” cinco millones de euros con la venta, en la casa de subastas Christie’s de Londres, de una firma de estilo Luis XIV. Piezas como estas son raras, pero la calidad y la belleza de los muebles antiguos significa que algunos de ellos sobreviven a los siglos. Sin embargo, muchos más se pierden por el coste económico de mantenerlos.
Pero muchos profesionales se dedican a restaurar el esplendor de piezas que, en la mayoría de los casos, llegan “en muy mal estado”. La restauración de un mueble histórico es, hoy por hoy, como un trabajo de lujo. Los conocimientos deben ser amplios, ya que trabajar como restaurador implica conocer hasta 17 profesiones diferentes. A saber: Afinador, capataz de taller, vidriero, barnizador, herrero, cerrajero… Antes los oficios eran muy específicos y muchos se terminaron perdiendo…
Pero se debe optar por una línea, un criterio. El proceso de trabajo hay quien asegura que se ha de basar en una premisa: para restaurar un mueble antiguo, hay que pensar como el artesano que lo creó. Hay que ponerse en la mente de la persona que lo hizo y respetar su forma de trabajar.
En algunos talleres no descuidan la maquinaria moderna, pero a la hora de trabajar con muebles utilizan los mismos materiales originales. De hecho, hay verdaderos coleccionistas de maderas y herramientas antiguas, muchas de las cuales se utilizan en el taller. Los profesionales no creen que tengan que mejorar o hacerlo mejor o peor que el trabajo inicial. Si una mesa es rústica, deben conservar esta esencia. Para los acabados, renuncian a productos sintéticos, como barnices de celulosa.
